El PNV apuesta, en su manifiesto del Aberri Eguna 2016, por alcanzar la próxima legislatura un nuevo estatus consensuado en el Parlamento vasco "que reconozca la identidad nacional de los vascos", que recoja su "sentido de pertenencia a una nación", y el respeto a su "derecho a decidir su futuro". Además, reclama una relación de bilateralidad con el Estado.