Creada hace tres años, la consultora Acento, con sede central en Madrid y delegaciones en Barcelona y Bruselas tiene como objetivos prioritarios faculitar las relaciones entre las Administraciones públicas y el sector privado. Proponen el Conocimiento y el Diálogo como métodos para resolver los problemas, unas aspiraciones notables en este ápoca de enfrentamientos generalizados entre los partidos políticos y tensión entre las distintas Administraciones del Estado.
Para conseguir esos objetivos y, sobre todo, dar confianza a los clientes en cuanto a su eficacia, nada mejor que mostrar el equipo con el que cuentan, desde los ex ministros José Blanco ( PSOE ) y Alfonso Alonso ( PP ) a una estudiada mezcla de ideologías y talento para relacionarse con todo tipo de estamentos públicos y empresas privadas, tanto en Madrid con Miguel Angel Villanueva. David Alvaro, Jaime Forero y Raquel Herrera, los cuatro de probada militancia popular, como Elena Valenciano, Guillermo Martínez y Ricardo Cortés, de igualmente probado origen socialista.
Un guiño meditado hacia la ERC catalana con Miguel Gamisans y al izquierdista Podemos con Marco Candela. Faltarían la representación de Ciudadanos, pero ese espacio de centro político y sociológico lo tiene bien cubierto sus fundadores, y el alejamiento de Vox y cualquiera de sus actuales o pasados dirigentes es una de las condiciones que también unen a Pedro Sánchez y a Núñez Feijóo. Trato sí, relaciones respetuosas sí, hasta cooperación allí donde pueda ser necesario en el mundo de la empresa privada, pero sin estar dentro del núcleo de la consultora.
En Acento estuvo Antonio Hernando, hoy incorporado al Gabinete de Sánchez en la presidencia del Gobierno junto a Oscar López, los tres antiguos hombres de confianza de José Blanco durante los mandatos de José Luís Rodríguez Zapatero, el ex secretario general del PSOE y ex presidente que mantiene una intensa vida empresarial a nivel internacional, a veces muy bien acompañado por otros ex dirigentes políticos como son José Bono y Miguel Angel Moratinos, todos ellos con excelentes contactos y relaciones con gobiernos de América del Sur y Africa, zones en las que coinciden con varias de las grandes empresas y bancos españoles.
Uno de los pilares de Acento más interesantes de cara al futuro y al reparto de los fondos europeos que llegarán a españa, es el que tiene la base en Bruselas. Allí, el hijo del hoy organizador del Congreso del Partido Popular que eligirá a Núñez Feijóo como nuevo presidente, antiguo hombre de confianza en Valencia de Francisco Camps y luego eurodiputado, Esteban González Pons, que se distingue de su padre por el segundo apellido, Guitart, tiene en su poder una de las mejores agendas políticas para moverse en el complicado mundo político que dirige Ursula von der Layen al frente de la Comisión y que se extiende hasta el Parlamento con sede en Estrasburgo.
Roto de nuevo y por tercera vez el centro político independiente, las futuras políticas de Sánchez y Feijóo van a dirigirse hace ese espacio sociológico, alejándose el primero de sus socios de Gobierno y de las tendencias más radicales del separatismo vasco y catalán; y de su competidor electoral Vox, el segundo. Blanco y Alonso pueden ejercer de anclaje externo en las necesarias relaciones entre PSOE y PP en el inmediato futuro cargado de problemas al que se enfrenta nuestro país. La discreción de todas las partes será esencial pero los mimbres para lograrlo son los mejores.
