Ya han probado el amargo saber de la derrota ( PSOE y Unidas Podemos ) y el nectar de la victoria ( PP ) en Madrid, Castilla y León y Andalucía. La siguiente “desgustación” será en mayo del año que viene, y el gran banquete, el de las elecciones generales, no tiene fecha fija, dependerá de la voluntad de ese “cocinero político” que es Pedro Sánchez. Los platos- las promesas- se conocen y tendrán que presentarlas desde la derecha a la izquierda pasando por los nacionalistas.