Quedan muy lejos los tiempos en los que
Isabel Díaz Ayuso, con 25 años, comienza a trabajar en el área de la comunicación con el entonces vicepresidente segundo del Gobierno madrileño. Era el año 2003 y
Alfredo Prada, que también era Consejero de Justicia, convence a
Esperanza Aguirre de la conveniencia de unir en un mismo espacio físico todos los temas que afectan al día a día de los casos judiciales. Arranca el proyecto de la que será Ciudad de la Justicia, con edificios singulares que llevarán la firma de algunos de los mejores arquitectos del mundo. Hoy, 22 años más tarde, arranca por fin, en la zona de Valdebebas, lo que será el mayor completo judicial del mundo, muy cerca de la Ciudad Deportiva del Real Madrid y del Aeropuerto Adolfo Suárez.