La mitad de Gaza está destruída y los que fueron sus habitantes no tienen nada, ni casa, ni alimentos, ni electricidad. Gaza es una ruína que hay que reconstruir prácticamente desde cero. La ONU dice que se necesitarán al menos quince años y entre 50.000 y 70.000 millones de dólares para hacerlo, cifras que parecen muy bajas y que no tienen en cuenta la situación política y los enfrentamiento que llevaron a la Israel de Benjamin Netanyahu a matar a más de 40.000 palestinos, incluidos mujeres y niñós con la excusa de que se trataba de acabar con la estructura de la organización Hamas. Lo mismo, en menos escala, ha ocurrido en Cisjordania y en el sur del Líbano.