La Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha reprochadoa la Comunidad de Madrid que no conteste, pasados meses de la solicitud, a su demanda de colocar una placa que recuerde la tortura franquista practicada en su actual sede del Palacio de Correos, sede en la dictadura de la Dirección General de Seguridad.
El pasado 22 de enero la ARMH registró una nueva petición al Gobierno de la Comunidad de Madrid para que se pusiera allí, en la fachada del conocido edificio de la Puerta del Sol, en la que se cuente que fue un centro de detención y tortura de la dictadura franquista. Y recuerdan que la fachada de ese palacio cuenta con dos placas homenaje --una por los héroes del 2 de mayo de 1808 y otra por las víctimas de los atentados del 11M-- de hechos que no ocurrieron allí.
El una carta, recuerdan que en los sótanos del edificio del Puerta del Sol número 7 fueron torturadas miles de personas, sobre todos estudiantes, militantes de partidos clandestinos, homosexuales y todo tipo de disidentes políticos y morales.
Además de ser detenidos ilegalmente eran sometidos a torturas y maltratos que les causaron lesiones físicas y emocionales; en algunos casos de extrema gravedad.
"Las personas que luchaban por el regreso de las libertades y la celebración de elecciones democráticas fueron recluidas y atormentadas por la policía franquista. El sufrimiento de todas esas personas debe servirle a la sociedad para recordar el daño que pueden hacer e hicieron quienes conquistaron el poder mediante el uso de la violencia, se negaron a celebrar elecciones democráticas sin que nada se lo impidiera y persiguieron a quienes no compartían su ideario, negando y aplastando la diversidad que es uno de las principales fortalezas de los valores democráticos y representa el ejercicio de la libertad y el desarrollo de la propia identidad. Hechos tan graves y tan aleccionadores de lo que no se debe repetir deben ser reconocidos públicamente", indica la asociación en el escrito.
Por ello, solicita la colocación de una placa, en la fachada de la Real Casa de Correos, que recuerde a las personas que allí fueron torturadas, que denuncie hechos tan graves y que reconozca a los hombres y mujeres que lucharon y se esforzaron "para que quienes desde 1983 ocupan el despacho de la Presidencia de la Comunidad de Madrid hayan llegado al puesto como consecuencia del resultado de unas elecciones democráticas y no por la designación de quienes tomaron el poder violentamente mediante un golpe de Estado".
Para Emilio Silva, presidente de la ARMH y nieto del primer desaparecido por la represión franquista identificado genéticamente, "el Gobierno de la Comunidad tiene que acabar con el negacionismo y dejar de esconderle a la ciudadanía las atrocidades que se cometieron en ese centro de tortura y detención ilegal de la dictadura franquista".
"Se tiene que recordar el sufrimiento de militantes que defendían la democracia, de homosexuales que fueron torturados por querer ejercer sus derechos y de todas las personas que lucharon o sufrieron para que quien ocupa hoy la presidencia de la comunidad haya sido elegida en unas elecciones democráticas", concluye.
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