El 97 por ciento de las incidencias relacionadas con seguridad en estas dependencias se dan, especialmente, en los depósitos de trenes, y tienen que ver con las acciones de grafiteros que se frustran en más del 77% de los casos
La Comunidad de Madrid va a reforzar la vigilancia en todos los recintos e instalaciones de Metro con un nuevo contrato de seguridad al que destinará más de 20,6 millones de euros en los próximos tres años, durante los que se aumentará más de un 3 por ciento las horas de vigilancia, especialmente durante los fines de semana.
El contrato ha sido adjudicado a la empresa OMBUDS e incluye un incremento en la patrulla de vigilancia móvil y una bolsa de horas de libre disposición para refuerzos extraordinarios en depósitos de trenes y patrimonio de Metro de Madrid, incluyendo los espacios museísticos y las oficinas, ha informado el portavoz del Ejecutivo autonómico, Ángel Garrido, en rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.
El 97 por ciento de las incidencias relacionadas con seguridad en estas dependencias se dan, especialmente, en los depósitos, y tienen que ver con las acciones de grafiteros que se frustran en más del 77 por ciento de los casos.
En concreto, el pasado año se lograron evitar 933 intentos de pintar ilegalmente las instalaciones, trenes, recintos o cocheras de Metro.
Metro cuenta con otro contrato para la seguridad de la red, que se divide, a estos efectos, en ocho zonas geográficas vigiladas por más de 8.000 cámaras que velan por la tranquilidad de los usuarios del suburbano madrileño.
Precisamente, los viajeros sienten más seguridad y valoran este servicio con un notable, tal y como lo revela la última Encuesta de Percepción del Servicio, correspondiente al primer trimestre de 2015.
En la misma, la opinión sobre la calidad de la seguridad aumenta con respecto a oleadas anteriores hasta un 7,26 sobre 10, frente al 7,13 registrado a finales de 2014.
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