El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha insistido este miércoles en que su presencia en el cumpleaños del empresario Manuel Torreblanca en Baqueira Beret, condenado por defraudar a Hacienda, respondía a un viaje "privado" y por tanto entiende que no debe dar explicaciones al respecto.
"He declarado ya que fue un viaje privado y, por tanto, no creo que tenga nada que declarar", ha manifestado Catalá en los pasillos del Congreso tras asistir a la sesión de control al Gobierno al ser preguntado por cómo se pagó su asistencia a esa fiesta.
Hace dos semanas, el PSOE, por boca de la diputada vallisoletana Soraya Rodríguez, aprovechó el Pleno del Congreso para recriminar a Catalá su presencia en esa "estafa" y para recomendarle que "vigile" quién le llama y quién le invita. Sin embargo, el titular de Justicia no dedicó ni una sola palabra a responder al reproche de la diputada socialista.
EL GOBIERNO, CENTRADO EN APROBAR LEYES ANTIFRAUDE
Sin embargo, su compañero del PSC Joan Ruiz se apresuró a dejar claro que el PSOE seguirá pidiendo explicaciones por la asistencia del titular de Justicia a ese cumpleaños "hasta que aporte la documentación".
Quien sí ha hablado sobre esta cuestión ha sido el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, quien atendió hace una semana en el Pleno del Congreso una pregunta del portavoz de En Comú, Xavier Domènech, sobre este asunto.
Montoro dijo que no es "obligación" del Gobierno pronunciarse sobre si es ético o no que el responsable de Justicia asistiera al cumpleaños de un empresario condenado por hasta siete delitos scales, sino aprobar leyes para perseguir el fraude.