Estos usuarios, que necesitarán recurrir a una tarjeta de crédito, un préstamo o un anticipo de nómina, tendrán que abonar a su banco un interés medio del 12,67 por ciento.
En general, los consumidores españoles gastarán una media de 530 euros, una cifra que aumenta un 5,16 por ciento respecto a los 504 euros que se registraron el pasado año. De este gasto, el 43 se destinará a regalos, el 29 por ciento a comida y el 28 por ciento a ocio.
Entre los motivos que llevan a los consumidores a aumentar el gasto durante próximas fiestas, según esta investigación se encuentran "la mejora de la confianza del consumidor en el último año, del empleo y de la renta disponible en los hogares".
En este contexto, el estudio de Kelisto ha revelado que las entidades "han comenzado abrir el grifo del crédito" y que en lo que va de año el volumen de créditos concedidos "supera las cifras globales de 2012 y 2013.