La jueza requiere a la Comunidad de Madrid la remisión en un plazo de 20 días, desde la comunicación judicial, del expediente administrativo
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha admitido a trámite el recurso contencioso-administrativo interpuesto por Ecologistas en Acción, en colaboración con la asociación de vecinos SOS Ermita del Santo, contra la modificación puntual del Plan General para la creación del Área de Planeamiento Específico 10.24 Paseo de la Ermita del Santo.
En un auto, al que tuvo acceso Europa Press, la jueza requiere a la Comunidad de Madrid la remisión en un plazo de 20 días, desde la comunicación judicial, del expediente administrativo.
Fue en febrero cuando el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid aprobó la modificación definitiva del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid y dio luz verde al plan definitivo para el Paseo de la Ermita del Santo, que permitirá construir 529 nuevas viviendas y más zonas verdes.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, se comprometió a que la transformación de la Ermita del Santo, una zona que estaba "degradada", se materialice "lo antes posible". "Ahora los vecinos van a ganar dotaciones, espacios públicos, zonas verdes y además también se va a hacer vivienda", defendió.
Ecologistas en Acción y SOS Ermita del Santo han decidido recurrir judicialmente el proyecto aprobado por la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid por "ser un proyecto que atiende a los beneficios de propietarios privados de suelo y las constructoras, pero no a las necesidades vecinales".
LA VECINDAD ALERTA DE "UN PELOTAZO"
"Los vecinos no necesitan rascacielos ni viviendas de lujo, sino dotaciones como más escuelas infantiles públicas, institutos, una biblioteca, centro de mayores, mejoras en los centros de salud o instalaciones deportivas públicas", han subrayado las asociaciones en un comunicado.
SOS Ermita del Santo recogió a pie de calle más de 5.000 firmas y colabora con Ecologistas en Acción en el recurso interpuesto. La vecindad considera que este proyecto, al que denomina "pelotazo", se ha impulsado "de espaldas a la ciudadanía, sin consulta previa ni posibilidad de participación y que responde exclusivamente al interés particular de la socimi propietaria del centro comercial".
"El barrio sufrirá impactos negativos en cuanto a transporte, zonas verdes, o contaminación atmosférica. En su mayor parte de precios inasequibles, las nuevas viviendas supondrán además un incentivo a otras operaciones inmobiliarias especulativas y a los alquileres turísticos, contribuyendo al encarecimiento de la vivienda y a consecuente expulsión de muchos vecinos y vecinas", ha subrayado.