
La "dulce" derrota merengue
jueves 02 de octubre de 2014, 12:47h
La derrota sufrida por el Real Madrid en el Nou Camp se puede asimilar desde dos posiciones bien distintas. Los hay que la califican de “dulce”porque el equipo blanco dio una aceptable imagen, posiblemente mereció más que salir de vacio y consiguió que el Barcelona no le pasara por encima, como algunos podían temer recordando el 2-6 del Bernabéu de la pasada campaña. Claro que también se puede pensar que ni ofreciendo una de sus mejores actuaciones en lo que llevamos de temporada y con un Barcelona que estuvo en inferioridad durante una media hora, el Madrid fue capaz de lograr algo positivo.
La sensación que tengo es que los merengues dejaron escapar una oportunidad inmejorable. Para haber devuelto la afrenta del año pasado, y para haber dado un puñetazo encima de la mesa de la liga y haberse ido en la tabla con cuatro puntos de ventaja. En definitiva, para haber dejado tocados de verdad a los de Guardiola. Porque sí, el Madrid podrá sacar todas las conclusiones positivas que quiera, pero mal haría en tener un “sabor a victoria” tras este duelo, porque la realidad es que el que mira ahora por el retrovisor a su rival es el Barcelona.
Llevar la iniciativa durante parte del choque y tener cuatro ocasiones de gol creo que no debería ser suficiente para que todo un director general del Real Madrid, como Jorge Valdano, diga tras perder ante el eterno rival y ceder el liderato que “nos vamos satisfechos”. Mandar ese mensaje al vestuario es peligroso, porque estás demostrando complejo de inferioridad y rebajando el nivel de exigencia. Y Florentino no ha hecho este proyecto millonario para conformarse con perder por la mínima en Barcelona. Vamos, digo yo.