El Balonmano Alcobendas se queda en la Asobal tras sellar su permanencia en el último partido

El Club Balonmano Alcobendas certificó en la última jornada de competición su permanencia en la Liga SabadellAtlántico Asobal para la próxima campaña. El equipo que dirige Rafa Guijosa realizó un buen encuentro ante el Octavio Pilotes Posada pero lo hizo sólo hasta el minuto 45 de partido, momento en que sin explicación aparente desapareció y pasó del 21-16 a favor en el marcador a un extraño 21-22 final. Afortunadamente para los intereses del conjunto alcobendense, y gracias a la clara derrota de Teucro en el Palau ante el Barça, el traspiés del Amaya Valdemoro quedó en mera anécdota.

Y fue una verdadera lástima, porque al margen del electrónico el choque ante el Pilotes se estaba convirtiendo en una buena noticia para el juego de conjunto de Alcobendas, en un notable alto para los dos porteros de la casa –Rade Mijatovic y Wenceslao Aldomar- y sobre todo en una verdadera exhibición del pivote de Alcobendas, Víctor Tremps, que estuvo extraordinario, anotó 6 goles, y campó a sus anchas por los 6 metros del Pilotes. Del lado de los gallegos, destacaron sobre todo el lanzamiento y los goles el lateral Iván Infestas, que sumó 8 tantos.

El éxito logrado por el equipo Asobal del Balonmano Alcobendas premia el trabajo, la constancia y la coherencia de un grupo de jugadores y técnicos que, en todo momento, incluso en los momentos más delicados de la competición, han creído en sus posibilidades. El secreto es bien sencillo: el equipo ha sabido desde la primera jornada a lo que jugaba, ha entendido muy pronto dónde estaban sus límites y sus posibilidades, jamás ha bajado los brazos y, a cambio, se ha acostumbrado semana tras semana a ser siempre competitivo, a plantar siempre batalla.

El equipo que dirige Rafa Guijosa se ha ganado a pulso el derecho de estar una temporada más en la élite del balonmano español. El absoluto aprovechamiento de todos los jugadores de la plantilla, que este curso ha ganado en versatilidad, le ha valido al BM Alcobendas la supervivencia. El club que tumbó en casa al Ademar León, que aplastó al Cai hace unas pocas semanas, que plantó cara al Barcelona en el Palau y que ofreció buena imagen en casa ante grandes de la competición como Portland, BM Valladolid o BM Ciudad Real, el equipo que supo aguantar la encarnizada lucha con el Teucro en busca de la salvación, se queda en la Asobal.

Y el año que viene querrá más, necesitará subir un escalón, estará obligado a seguir creciendo. Ése es su nuevo reto.