Investigadores de la Universidad Europea de Madrid han desarrollado un cuestionario innovador para medir la autoeficacia y el miedo a hablar en público entre universitarios hispanohablantes.
La habilidad de hablar en público se ha convertido en un elemento esencial tanto en el ámbito académico como profesional. Sin embargo, para muchos estudiantes, esta competencia puede transformarse en una fuente de ansiedad considerable. Un reciente estudio publicado en la revista Current Psychology introduce una herramienta que permite evaluar tanto el temor como la confianza personal al enfrentarse a una audiencia.
El miedo a hablar en público, conocido como glosofobia, es una forma común de ansiedad social que varía desde un leve nerviosismo hasta un pánico extremo. Este temor no solo obstaculiza la capacidad de comunicarse con claridad, sino que también puede acarrear consecuencias emocionales y profesionales significativas. Se trata de uno de los miedos más prevalentes en el entorno universitario, limitando el rendimiento académico y la participación activa en clase, lo que afecta negativamente la autoestima y las oportunidades de desarrollo personal y profesional.
Un cuestionario validado para estudiantes
El equipo de investigación, dirigido por el profesor Francisco Montesinos del grupo “Psicología Clínica y Salud” de la Universidad Europea, ha validado el Cuestionario de Autoeficacia y Miedo a Hablar en Público (CAHP-CIHP). Este instrumento fue creado por el profesor Arturo Bados de la Universidad de Barcelona y probado con 575 estudiantes de diversas universidades españolas. Los resultados muestran que el cuestionario es altamente fiable y válido para medir las emociones de los jóvenes al hablar ante un público.
Los hallazgos indican que el cuestionario presenta una excelente consistencia interna y una estructura factorial robusta, lo cual garantiza su efectividad en la evaluación deseada. Además, sus puntuaciones se correlacionan significativamente con otras escalas consolidadas que miden la ansiedad social y los pensamientos negativos durante presentaciones orales.
Estos resultados son reveladores y arrojan luz sobre un problema que afecta a numerosos jóvenes en nuestra sociedad actual. A menudo, los estudiantes carecen de formación adecuada o retroalimentación sobre cómo mejorar sus habilidades comunicativas. Sin herramientas precisas para identificar sus dificultades, resulta complicado ofrecerles apoyo efectivo. Este nuevo cuestionario podría ser fundamental para que universidades, docentes y profesionales de la psicología detecten a tiempo a quienes requieren ayuda, permitiendo diseñar programas de entrenamiento más personalizados.
Avances hacia una educación integral
Dada la importancia creciente de saber comunicar eficazmente los propios conocimientos, este avance representa un paso significativo hacia una educación más completa y humana. Con miras a continuar progresando en esta línea investigativa, el equipo del profesor Montesinos está trabajando en otro estudio que demuestra la eficacia de una intervención psicológica utilizando realidad virtual y Terapia de Aceptación y Compromiso para superar el miedo a hablar en público entre universitarios; este cuestionario fue uno de los instrumentos utilizados para medir dicha intervención.