En poco más de un mes el PP decidirá la estructura interna del partido. Ya sabemos con mucha antelación quién será el presidente: Mariano Rajoy reina y gobierno en las siglas de la derecha española sin nadie que le haga sombra. Todos sus "posibles" adversarios internos han tirado la toalla, incluido José María Aznar que se mantiene de militante de base por voluntad propia. Queda el resto de los números que siguen al uno y la gran incógnita: ¿seguirá María Dolores de Cospedal como secretaria general?.
La actual ministra de Defensa se ha mantenido fiel al líder en todas las circunstancias, por encima mucha veces de lo que le reclamaba su propia prudencia en temas que eran heredados de otros compañeros. Su puesto en el escalafón del PP es pretendido por varios de sus amigos y adversarios, desde Maillo a Alonso, por colocar sólo a dos nombres que callan y otorgan al poderoso grupo de dirigentes populares que desean desde hace años que la también presidenta del partido en Castilla la Mancha sea "reducida" por Rajoy a dirigente regional sin más poderes.
La guerra por el número 2 se va a recrudecer en estas semanas, al igual que las presiones internas y externas sobre el presidente - que será en definition quien decide - y sobre la militancia y la opinón pública. Unos lo van a hacer por enemistad personal con Cospedal, otros por ocupar posiciones para su grupo de intereses, y otros pensando en una más que lejana sustitución de Rajoy y en el nombre del heredero/a, una situación que se preguntea quien se pregunte siempre recibe la mismo respuesta: cuando Mariano haya batido todos los records de sus predecesores.
El presidente del PP y su secretaria general llevan juntos y conociéndose a fondo desde los tiempos en que José María Aznar mandaba en el Gobierno y en el partido. El gallego utiliza con habilidad su psición y deja que los conflictos y las peleas entre su "tropa" le despejen el tereno que le rodea; y la castelano manchega conoce a su jefe y a sus enemigos, son muchos años de Navegación por los despachos de la calle Génova y por los entresijos de la lata Admiistración del Estado. Conoce a los dirigentes territorales y la opinión que tienen de las peleas por el poder. Cuenta con más apoyos que críticas e incluso alguno de los que más han hecho por quitarle este sillón están acercándose a ella.
Rajoy va a guardar sus deseos y estrategias hasta el final. Lo hace siempre y le ha ito bien. Conserva el Gobierno, conserva la presidencia del partido, está por encima de sus adversarios políticos que por algo lleva cuarenta años de experiencia a sus espaldas, está recuperando votos...No vislumbra sombras e su horizonte inmediato salvo que desde Europa le den un susto desde Bruselas o desde Berlín, y eso no parece que vaya a ocurrir.
Don Mariano es un maestro en la teoría de los equilibrios: da poder y responsabilidades por zonas y momentos. Lo hace en el Gobierno de la Nación y e el seno del PP. Y no parece que vaya a cambiar. Aplicará normal internas si le conviene y estatutos si le interesa. Nadie le va a discutir en público lo que haga. Y la principal rival de la secretaria general no va a entrar en esa pelea de sillones. Es lista y tiene el puesto que le interesa desde hace cinco años. María Dolores y Soraya Sáenz de Santamaría se parecen profesional y políticamente más de lo que ellas mismas parecen creer.