Europa se une contra el terror islamista en las calles de París

Un millón de personas encabezadas por las familias de las víctimas y los compañeros de los dibujantes asesinados en la redacción del semanario satírico, a los que seguían los principales mandatarios de Francia, Alemania, España, Italia, Gran Bretaña y una amplia representación de otros países como Estados Unidos, se manifestaron ayer por las principales calles de París para decir no al terrorismo islamista y afirmar su fe en los tres grandes principios que guiaron la revolución francesas: libertad, igualdad y fraternidad.

Las manifestaciones también se celebraron en otras capitales galas mientras que desde La capital norteamericana el presidente Obama anunció la celebración de una cumbre internacional para tratar el tema del terrorismo, mientras que desde distintos ámbitos políticos y policiales se pide revisar los acuerdos de libre circulación de personas en la Unión Europea, y la puesta en marcha de protocolos de registro en los aeropuertos para evitar la ida y vuelta de yihadistas que se trasladan a Yemen para recibir entrenamiento.

El presidente del gobierno español que caminaba del brazo de sus colegas europeos, y al que acompaño a la capital del Sena el ministro del Interior, Fernandez Diaz, insistió en su defensa de la democracia y en asegurar que nuestro país está preparado para luchar contra el terror y que nunca los asesinos doblarían el brazo de la democracia y la justicia. Palabras muy similares las pronunciaron los líderes del PSOE, Izquierda Unida, UPyD y los nacionalistas vasxos y catalanes.

La nota negativa de la jornada la puso el Frente Nacional galo, que se negó a participar en la reunión y cuyo ex presidente Jean Marie Le Pen se burló de los asistentes a la manifestación al tiempo que, al igual que su hija, pedía la introducción de la pena de muerte en el derecho penal de su país.