Ya somos más pobres, ¡enhorabuena¡

jueves 02 de octubre de 2014, 12:47h

Desde la Comisión Europea, desde el Banco Central Europeo, desde la cancillería de Berlín, desde el Fondo Monetario Internacional, desde los fondos de inversión, desde las agencias de rating, desde todos esos sitios y probablemente desde alguno más  nos querían más pobres a todos los españoles ( y que se salvara el que pudiera ), y lo han conseguido. Dado que el euro comunitario no se podía devaluar pues afectaba a más de quince países y a una buena parte de la economía mundial, la alternativa era devaluar a los países que tuvieran un alto déficit, una economía tambaleante y unas cifras de paro stratosféricas. El retrato de España. Ya habíamos cumplido durante los años de la reconversión alemana con nuestro papel de compradores de lujo y ahoora nos tocaba ¨pagar por los pecados cometidos¨. Dicho y hecho: desde hace cinco años y sin parar nos vamos haciendo más pobres.

Su casa, la mía; su sueldo, el mio; su coche, el mio; todos sus ahorros, sus inversiones, las mias valen menos. Nuestras empresas, todas, valen menos. Nuestros bancos valen menos. Nuestras infrastructuras valen menos. Nuestra democracia vale menos. Estamos en la lista de saldos y listos para ser comprados por la mitad o menos de lo que valíamos hace diez años. Misión cumplida para todos los organismos de los que hablaba al principio, han cumplido con su papel y, no contentos y exigidos por los que de verdad les pagan sus suculentos y nada depreciados salarios, siguen pdiendo más y más. No es nada extraño que coincidan una y mil veces en sus deseos y admoniciones el FMI y Bruselas. Son la misma cara de la misma moneda, la que se echa al aire sabiendo que siempre saldrá esa misma cara, pues no hay otra.

La ofensiva no va a parar, tengamoslo claro: a cada petición o exigencia concedida y puesta en marcha seguirá otra. es una estrategia calculada paso a paso, pero sin un paso atrás y cuando parece que lo hacen, como el alargar nuestra puesta al día con el déficit lo único que están haciendo es tensar más la cuerda que nos han colocado en el cuello. Ahora, cuando sus mensajes parecen dirigirse hacia los salarios, con esa rebaja del diez por ciento, lo que buscan es conseguir un efecto multplicador en la economía, por más que digan lo contrario. Es de lo más sencillo: para salir de la crisis necesitamos reactivar el mercado interior, consumir más en definitiva. Y eso no se consigue con el paro por encima del 25 por ciiento, con menos derechos y protección social, con más impuestos, con salarios más bajos lo que lleva a menos ahorro y menos renta disponible para gastar e invertir.

¿Son conscientes las llamadas autoridades financieras iinternacionales de que nos están pidiendo al mismo tiempo que aceleremos y que frenemos?. Por supuesto que lo son, lo que pasa es que no pueden decir la verdad, que no es otra que quieren que España sea más barata para poder colonizarnos aún más  y que nuestro sistema financiero y productivo, nuestras empresas y bancos, nuestro valor como país esté más al alcance de los especuladores de todo tipo. Luego están sus equivocaciones, sus errores, que son muchos, pero que se ocultan tras la misma pantalla: yo digo cuando me equivoco, de la manera en que lo hago y elijo mi propia penitencia, que es ninguna. Ningún cargo de los organismos internacionales que han intervenido en el nacimiento y crecimiento d ela crisis ha presentado su dimisión. Ningún ejecutivo de esos mismos organismos ha asumido una pérdida de ingresos, más bien lo contrario. Ninguno se ha ido a su casa avergonzado por lo que ha generado o consentido. Sus errores y sus ¨consentimientos¨los pagamos otros.

En España los llamados hombres de negro, los inspectores del Banco Central, del FMI, de la Comisión pueden ver y mirar allí donde les plazca. No lo pueden hacer en Francia o en Alemania, ni siquiera en Italia. No se lo permiten, ni a ellos se les ocurre. Son dos varas de medir muy diferentes: una para los pobres, otra para los ricos. Y a nosotros nos han situado en el primero de los grupos tras habernos dejado soñar que estábamos en el segundo. Nos ¨drogaron¨con la ¨champion league¨cuando de verdad perteneciamos a la segunda división. Les pongo un ejemplo que es aplicable a Alemania, a Italia, a Francia y hasta a Corea del Sur: ¿cuantas marcas de coche nacionales hay en cada uno de esos países?. Y que tenemos aquí, en esta España nuestra.

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