Convenio Comunidad y 37 asociaciones para impulsar la prevención de riesgos laborales

La consejera de Empleo, Turismo y Cultura, Ana Isabel Mariño, ha suscrito con el presidente de la CEIM, Arturo Fernández, el convenio marco de colaboración para poner en marcha actividades que permitan mejorar la seguridad laboral, un convenio del que se derivarán 37 acuerdos específicos con otras tantas asociaciones empresariales.

Con este convenio ambas instituciones desarrollarán actuaciones orientadas al asesoramiento y asistencia técnica de empresarios, trabajadores y sus representantes. Se actuará prioritariamente en empresas de sectores clave, colectivos de trabajadores especialmente expuestos a los riesgos laborales y microempresas. En este sentido, la consejera incidió en la necesidad de la colaboración entre la administración pública y los agentes
sociales en materia de riesgos, “una condición indispensable para garantizar el éxito de los programas de seguridad y salud laboral”.

Es su opinión, es necesaria una evaluación continua y una actualización periódica de los planes empresariales, para que la labor que desarrolla la Comunidad de Madrid a través del Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo (IRSST) sea más eficaz aún y contribuya a mejorar las condiciones laborales en la región.

Este acuerdo se enmarca en la estrategia definida por el IV Plan Director, al que la Comunidad de Madrid destinará 20 millones de euros en 2013. Mariño anunció que en estos primeros meses de vigencia del Plan Director, el Gobierno regional ya ha realizado más de 2.000 visitas de asesoramiento a empresas, se han atendido 2.300 consultas y se han impartido acciones formativas a 11.000 personas.

La consejera destacó que la prevención de riesgos laborales debeasentarse sobre dos pilares: la pedagogía y la concienciación. Sin los conocimientos adecuados de trabajadores y empresarios, y sin la buena
práctica preventiva, es imposible mejorar las condiciones de seguridad y salud laboral, explicó la consejera.

“Detrás de un accidente de trabajo o enfermedad profesional haysiempre un coste social y humano, y un efecto económico, que repercute también en la pérdida de productividad del individuo y competitividad de la
compañía”, dijo. Por ello la prevención no sólo debe ir encaminada a evitar la producción de daños sino también a conseguir un bienestar completo del trabajador.

En su intervención, la consejera de Empleo, Turismo y Cultura se refirió a la aparición de actividades profesionales ligadas al uso de tecnologías de la información y la comunicación, además de los adelantos técnicos aplicados a los procesos de producción y los avances de medicina laboral. “Todo ello abre un abanico de posibilidades para diseñar estrategias innovadoras y actuaciones que nos permitan avanzar en la consecución de
nuestros objetivos, a la vez que consolidamos los resultados ya alcanzadosen estos años”.