CC.OO alerta de un nuevo "tarifazo" en el transporte público

Ese posible porcentaje de incremento de las tarifas, lo ha calculado el sindicato en base a los datos del Presupuesto del Consorcio. Así, está previsto que los ingresos tarifarios aumenten con respecto a 2012 el 8,7%, mientras que los viajeros, que están disminuyendo en estos momentos de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística, por lo que no es previsible que vayan a aumentar el año próximo.

En este sentido, los viajes en Metro y autobús en Madrid están bajando más del 4% respecto del año anterior, por lo que sólo se puede conseguir ese 8,7% de aumento de los ingresos con un “tarifazo”, lo que para CCOO de Madrid supondría un grave castigo a los usuarios, al acumularse a los producidos en los últimos años.

Hay que recordar el volumen de las subidas de tarifas en Madrid, que han supuesto que en diez años el Metrobus de 10 viajes haya subido el 144%, el Abono Normal A, el 61,60% y el Abono Joven A, el 51,92%. Incrementos que CCOO considera absolutamente desproporcionados y que están contribuyendo a la pérdida de viajeros.

El aumento de los costes del transporte público que el Gobierno regional utiliza habitualmente para justificar estas subidas, sólo se está produciendo en las líneas privadas ferroviarias y en los intercambiadores de transporte explotados por concesionarias privadas. De acuerdo con las cifras de los sucesivos presupuestos, las líneas de Metro Ligero van a recibir un 62 % más que en 2011, mientras que a los intercambiadores se les incrementa el 106 %. Por su parte, EMT, mantiene sus costes y Metro los reduce. Para el sindicato, se ponen así de manifiesto los sobrecostes que realmente suponen estos servicios privatizados, mostrando la falsedad de la propaganda gubernamental acerca de los supuestos ahorros de la gestión privada.

Por lo que se refiere a las tarifas para 2013, para CCOO, una subida de esta magnitud e incluso, una algo menor, si finalmente el Gobierno regional no se atreviera con esa cifra, supondría una carga inasumible para una parte creciente de las familias madrileñas, especialmente para las más castigadas por la crisis, todas ellas dependientes de este transporte público.

Este sindicato estima que el actual escenario de crecimiento imparable del desempleo y del número de personas que han agotado las prestaciones correspondientes, al que se suman los descensos generalizados en los salarios públicos y ahora con la reforma laboral, en los privados, exige la congelación de los precios de los títulos de transporte usados por los trabajadores y estudiantes. Además de establecer un título social, destinado a las familias sin ingresos y con sus miembros en paro.