Las TIC permiten reducir un 30% el consumo eléctrico

jueves 02 de octubre de 2014, 12:47h
Se trata de un estudio en el que participa la Universidad Carlos III

Un estudio de la Universidad Carlos III apunta que las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) pueden permitir reducir hasta un 30 por ciento el consumo eléctrico en las ciudades.

Esta universidad madrileña participa en un proyecto europeo de investigación, uno de cuyos resultados es cómo optimizar la utilización de infraestructuras de consumo y su generación a nivel residencial.

Los científicos y tecnólogos que participan en el proyecto ENERsip, un consorcio compuesto por una decena de socios de cinco países europeos liderado por la empresa española Tecnalia, han diseñado, desarrollado y validado una plataforma TIC que permite reducir el consumo eléctrico a nivel residencial en torno a un 30 por ciento, integrando además instalaciones de micro-generación basadas en energías renovables como instalaciones solares fotovoltaicas instaladas en los tejados de las viviendas.

La clave para conseguirlo radica en dos estrategias: reducir el consumo eléctrico en los hogares (en torno a un 15 o 20 por ciento) y ajustar el consumo y la generación eléctrica en los distritos (un 15 o 20 por ciento, aproximadamente). Por un lado, el sistema “proporciona a los usuarios información sobre sus consumos, permitiendo identificar los electrodomésticos que más gastan y sugiere posibles soluciones, intentando modificar ciertos comportamientos y fomentando buenas prácticas que permitan reducir la factura eléctrica”, explica el profesor José Ignacio Moreno, del Departamento de Ingeniería Telemática de la UC3M. En este sentido, la plataforma ENERsip permite monitorizar los electrodomésticos mediante redes de sensores y actuadores para controlarlos de manera remota a través de aplicaciones web.

Por otro lado, el sistema que han diseñado lleva a cabo acciones automáticas que permiten ajustar en la medida de lo posible el consumo de los domicilios dentro de un distrito con la generación procedente de fuentes de energía renovable dentro del mismo, reduciendo flujos energéticos y, en consecuencia, pérdidas y costes. “Este tipo de acciones se encuentran enmarcadas dentro de lo que se conoce como gestión de la demanda eléctrica”, indica otro de los investigadores de la UC3M, Gregorio López. Por ejemplo, comenta, se podría aumentar la temperatura unos pocos grados en verano (o reducirla en invierno) en unos cientos o miles de hogares durante un período valle de producción de energía procedente de las fuentes de energía renovables de un distrito o mover la ejecución programada de ciertos electrodomésticos (lavavajillas, lavadoras) a un período en el que haya un pico de generación de energía procedente de estas renovables. “Por supuesto – apunta López - dichos hogares habrían accedido a participar en este tipo de programas por adelantado a cambio de ciertos incentivos y nunca se comprometerían ciertos niveles de confort prestablecidos”.

Las conclusiones de este proyecto, enmarcado en el ámbito de las llamadas Smart Grids (redes eléctricas inteligentes), evidencian que gracias a las acciones automáticas que permiten realizar las TIC se pueden alcanzar ahorros en el consumo eléctrico de hasta un 30 por ciento. Para obtener estos resultados, los investigadores han comprobado el funcionamiento del sistema en diversas simulaciones informáticas y han validado la plataforma en un proyecto piloto en tres edificios en diferentes puntos geográficos de Israel. Estas cifras, además, encajan en la senda de otros informes, como el SMART 2020, por ejemplo, que estima que la aplicación de las TIC para la mejora de la eficiencia energética podría traducirse en un ahorro de costes a nivel global de aproximadamente 600.000 millones de euros en el año 2020.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios