Aguirre evoluciona favorablemente y podría abandonar el jueves el hospital

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, evoluciona "favorablemente" tras la operación de cáncer de mama a la que se sometió ayer y, aunque aún permanecerá ingresada en el hospital, si sigue evolucionando de la manera en que lo está haciendo "probablemente mañana podría abandonar el centro hospitalario y trasladarse a su casa", según han explicado fuentes del Gobierno regional.

Estos buenos pronósticos ya los adelantaba el vicepresidente, Ignacio González, quien, tras visitar a Aguirre, ha comentado que, a pesar de que "todavía" no le habían comunicado cuándo le iban a dar el alta, "en las próximas horas probablemente" se iría a casa "dentro de las previsiones que tienen los médicos".

El 'número dos' del Gobierno regional ha explicado que Aguirre está "francamente bien", que ha pasado "muy buena noche" y que está "animada y andando". "Está todo, la verdad, muy bien", ha agregado.

Su buen estado de ánimo ha sido reflejado por las personas que la han visitado, así el consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, ha asegurado en tono de broma que a la presidenta regional, Esperanza Aguirre, habría que "extirparle el móvil", ya que "no hace nada más" que hablar por él.

"Está levantada y en la sala de visitas, muy contenta, muy bien, y estamos pensando en extirparle el móvil. Creo que lo que hay que extirpar de verdad es el móvil, porque no hace otra cosa que hablar por el móvil", ha dicho a los medios congregados.

Por su parte, el alcalde de Alcobendas, Ignacio García de Vinuesa, ha señalado que la presidenta regional ya se "queja" de la comida que le van a poner, lo que es "un síntoma de que está muy bien".

También ha señalado Vinuesa que durante su encuentro le ha preguntado a Aguirre por su estado de salud, "pero por su aspecto la respuesta ya la tenía". "Tiene muchísimas ganas de salir del hospital pero tanto su aspecto como su forma de hablar y alegría demuestra que ha ido todo muy bien", ha añadido.

En esta línea, ha asegurado que Aguirre "esta quejándose de la comida que le van a poner", lo que, a su juicio, "es un síntoma de que está muy bien".

Lo que también ha hablado con Aguirre ha sido del céncer que el alcalde sufrió hace unos años y que hizo que tuvieran que extirparle un riñón. "A mi me operaron hace 8 años y me quitaron un riñón porque también tenía cáncer, y a los 10 días estaba en la boda de mi hijo perfectamente", ha contado.

De hecho, ha asegurado que en estos momentos se le "olvida" que padeció cáncer. "Fue en un chequeo ordinario y afortunadamente el cáncer estaba perfectamente localizado y no había empezado a hacer de as suyas, ha indicado. Finalmente, ha reconocido que entre los pacientes de cáncer, contarse este tipo de experiencias "ayuda"