La Comunidad de Madrid ha llevado a cabo la restauración de los suelos de cerámica originales y los arcos de piedra en los patios de la Real Casa de Correos. Este emblemático edificio celebra este año su 40º aniversario como sede del Gobierno regional, un motivo que refuerza la importancia de preservar su patrimonio histórico.
El consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local, Miguel Ángel García Martín, destacó que estas labores, realizadas en agosto, son fundamentales para que “la casa de todos los madrileños siga siendo un referente del patrimonio arquitectónico de Madrid y de España para todos los ciudadanos y las personas que nos visitan”.
Detalles del Proceso de Restauración
En lo que respecta al suelo cerámico, el proceso incluyó el decapado del barniz para recuperar la superficie original del ladrillo. Se utilizó un producto especial que reblandece el material, permitiendo su retirada con una espátula. Posteriormente, se limpió y aclaró con agua a baja presión para eliminar impurezas.
Para los suelos compuestos por material calizo, se rellenaron huecos y fisuras causadas por el paso del tiempo. Se aplicó mortero y se pigmentó para igualar el color al resto de la pieza reparada, finalizando con un pulido que unifica la superficie.
En cuanto a los arcos, se realizó una limpieza exhaustiva de las columnas. Se eliminaron restos de fin de obra, eflorescencias y adhesivos mediante un cepillo de cerdas naturales y productos desincrustantes. En zonas con gran oxidación, se empleó maquinaria con agua a temperaturas controladas y productos ecológicos para eliminar impurezas adheridas.
Remodelación de la Fachada Principal
Aprovechando el mismo periodo, también comenzaron los trabajos en la fachada principal de la Real Casa de Correos. Estas labores incluyen la revisión de elementos ornamentales, reparación del faldón interior y renovación del tejado exterior.
Las obras están previstas para durar cuatro meses y se espera que culminen antes del inicio de la Navidad. Durante este tiempo, se instalará una lona con la imagen del edificio en cuestión, asegurando que la torre del reloj permanezca visible.
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