Botella contrata a dos abogados privados para el “caso Madrid Arena”

La alcaldesa Ana Botella no solo no dimite ni acepta ninguna responsabilidad en la tragedia de “Madrid Arena” en la noche de Halloween, sino que ahora va a gastarse miles de euros de todos los madrieños en abogados orivados que defiendan al Ayuntamiento y a ella misma, en vez de utilizar -como afirman siempre los ultraliberales- los servicios de los abogados municipales, que para eso están y que ya cobran sus nóminas todos los meses.

Lo primero que ha hecho la alcaldesa ultraliberl ha sido pasar de las 78 personas que componene el gabinete jurídico del Ayuntamiento para contratar a Luis Rodríguez Ramos, vicedecano del Colegio de Abogados, que acaba de jubilarse como catedrático de Derecho, y uno de los tres despachos más caros de Madrid. Su primer objetivo es personarse como acusación particular para “echar balones fuera”, y remitir todas las culpas a la empresa organizadora de la fiesta, Diviertt.

También la empresa municipal “Espacios y congresos de Madrid” ha contratado a otro prestigioso y carísimo despacho de abogados, que dirige Nicolás González Cuéllar, catedrático de procesal, y que hasta hace pocos años llevaba su padre, que fue el abogado de Jesús Polanco y el Grupo Prisa cuando el juez Javier Gómez de Liaño quiso procesarles por apropiación indebida”, y que acabó con la condena del propio juez por prevaricación.

Como cosa curiosa, el abogado de Miguel Angel Flores, el dueño de Diviertt, es Jorga Morales, miembro del despacho del ex diputado del PSOE, José María Mohedano. Mientras que al dueño de la empresa de seguridad Kontrol le lleva el abogado Oscar Zein, que defiende tambiel al llamado “sheriff de Coslada”, Ginés jiménez.