Rosa Díez asusta al PP

Si el nuevo presidente de la Comunidad madrileña tiene un rival de cara a las futuras elecciones del 2015, éste no será Tomás Gómez, el secretario general del PSM, sino Luís de Velasco o la persona que elija UPy D para encabezar sus listas. El partido de Rosa Díez, con ella como gran mascarón de proa de todo el proyecto, se ha convertido en el gran dolor de cabeza para Ignacio González, para Esperanza Aguirre ( que sigue presidiendo el PP madrileño y ya se ha encargado ella de recordárselo a todos ) y para Mariano Rajoy y el resto de dirigentes populares por la capacidad expansiva que tiene todo lo que ocurre en Madrid.

La que fuera ex-dirigente del PSOE y peleara con Rodríguez Zapatero por el liderazgo de los socialistas, ve como su proyecto avanza en toda España merced a dos factores que la favorecen de forma muy notable: por un lado, la crisis económica, política y social que padecemos y que ha hecho que una gran mayoría de ciudadanos se aleje de los dos grandes partidos y busque nuevas referencias en las que depositar su confianza y sus votos; y por otro, la posibilidad de pedir, exigir y plantear alternativas con una gran libertad dado que al no haber gobernado, ni estar implicada la formación en ninguna de las duras medidas de ajuste, eso le permite emitir mensajes con un marcado acento populista y de fácil "consumo" por parte de la amplia clase media y de los profesionales, que es donde Rosa Díez está encontrando mayor eco.

Si esta situación se mantiene hasta las próximas elecciones autonómicas y municipales, muchos dirigentes del PP creen que el partido perderá la posición de privilegio que tiene en la actualidad. Que perderán el gobierno en una gran mayoría de Ayuntamientos, que en otros perderán la mayoría absoluta de la que gozan y tendrán que negociar acuerdos puntuales con otras fuerzas, empezando por la propia UPyD, y que a nivel regional las dudas estarían entre un gobierno en minoría con apoyo indirecto de la misma UPyD, o ver como un pacto de esta formación con el PSM e IU les desalojaba del caserón de la Puerta del Sol.

Conscientes de este problema general que sufre su partido, y del difícil cambio que supone sustituir en los liderazgos y en las listas electorales a dos personas tan mediáticas y con tanto tirón como Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón, sus "sustitutos" en el gobierno regional y en la alcaldía de la capital están planteando una estrategia personal y política para los dos próximo años que les permita liderar las opciones del PP en Madrid, y mantener el poder del que ahora gozan. Una tarea difícil en la que tendrán que contar con sus propios equipos de confianza, al mismo tiempo que consoliden su relación con el aparato central de los populares y en especial con Mariano Rajoy y Dolores Cospedal.

De la misma manera que las diferencias entre Aguirre y Gallardón se dejaron a un lado a la hora de concurrir a las elecciones, pero se mantuvieron en el ejercicio de sus respectivos cargos, y chocaron a la hora de las ambiciones personales y políticas; ahora se están dando y se van a mantener entre Ignacio González y Ana Botella, con un primer "choque" inicial como fue la petición de un Congreso extraordinario del PP madrileño, por parte de la alcaldesa, nada más anunciar Aguirre su retirada. Un hecho que se interpretó entre los "aguirristas" y el propio González como un intento de obstaculizar su llegada a la presidencia dentro de un movimiento interno al que se sumó el portavoz parlamentario en el Congreso del PP, y que tuvo que "cortar" con rapidez la secretaria general del partido mostrando su apoyo directo al hoy presidente de la Comunidad.

Las inminentes citas electorales en Galicia, Euskadi y Cataluña van a permitirnos a todos ver hasta que punto el descontento hacia las dos grandes formaciones políticas se traduce en votos hacia otras opciones y en aumento de la abstención. Si las encuestas de intención de votos se cumplen, en las tres Comunidades van a ser los nacionalistas los que obtengan mejores resultados, y es difícil que UPyD entre en los respectivos Parlamentos, pero sí que aumente de forma significativa el número de apoyos. Otro hecho que ayudará a Rosa Díez y a los suyos a seguir creciendo.

Si miramos la Comunidad madrileña, la estrategia de UPyD puede cambiar en los próximos meses, sobre todo en Ayuntamientos como el de Getafe donde la ruptura interna entre sus dos concejales, que permitían gobernar al popular Juan Soler, está haciendo concebir esperanzas de volver al poder tanto a los socialistas como a Izquierda Unida. En el resto de municipios y en la propia Asamblea, los planteamientos y declaraciones de Luís de Velasco, Ramón Marcos, Natalia Junquera o Loreto Ruíz de Alda - por mencionar a algunos de los miembros más destacados de esa formación, hacen ver que el equilibrio que están intentando mantener entre PP y PSOE, derecha e izquierda, puede romperse hacia el segundo de los factores, alentados por el endurecimiento de las medidas del gobierno contra la crisis y la mayor crispación social que van a provocar.