La Junta de Gobierno de la ciudad de Madrid ha acordado retirar la modificación propuesta para la ordenanza del impuesto de Plusvalía para adaptar la norma al nuevo decreto del Gobierno de la Nación sobre el mismo.
Según ha detallado en rueda de prensa la portavoz del Gobierno municipal y delegada de Seguridad, Inmaculada Sanz, "dicha decisión llega tras la aprobación del real decreto ley por parte del Gobierno de España que modifica la regulación de este impuesto y da a los ayuntamientos un plazo de seis meses para adaptar la ordenanza a la nueva normativa".
El Consistorio, ante esta situación de incertidumbre, incluyó unos "ingresos prudentes" en su proyecto de presupuestos para 2022 en el impuesto de plusvalía, con una previsión de descenso en la recaudación en torno al 30 % respecto a 2021, dejándolos en 400 millones de euros.
El Gobierno municipal tenía previsto incrementar los porcentajes de la bonificación por transmisiones mortis causa a favor de ascendientes, descendientes y cónyuge, ampliando en cinco puntos la existente en 2021, que puede alcanzar el máximo legal del 95 %, en función del valor catastral para vivienda habitual y local de negocio.
Además, la Junta ha estudiado las 40 alegaciones presentadas contra los proyectos de ordenanzas fiscales 2022, de las que se han desestimado seis e inadmitido 34, estas últimas por no referirse a aspectos contemplados en los proyectos de ordenanzas presentado por el equipo de Gobierno.
La aprobación por el Pleno de estas ordenanzas fiscales para el próximo año hará que los madrileños ahorren a lo largo de estos tres años de Gobierno alrededor de 500 millones de euros en tributos del Ayuntamiento de Madrid, 350 millones solo en el ámbito del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI).
EL PROYECTO DE ORDENANZAS
El proyecto de ordenanzas mantiene una nueva rebaja del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), la tercera bajada del tipo general llevada a cabo en este mandato. En concreto, se reduce el IBI a todos los madrileños del 0,456% al 0,428%, continuando con el compromiso de alcanzar en 2023 el tipo del 0,4%, mínimo que permite la ley.
De esta medida se beneficiarán 2,2 millones de recibos, entre ellos familias, clases medias, autónomos, pequeños y medianos empresarios, que se ahorrarán casi 60 millones de euros. La nueva bajada del tipo general del IBI no sólo beneficia a los 1,5 millones de inmuebles de uso residencial, también lo hace a aquellos sectores más castigados durante la crisis de la Covid-19: 96.200 de uso comercial, 30.000 oficinas, más de 11.000 locales de uso industrial y 7.200 locales de ocio.
Así, Madrid se convierte en la tercera capital de provincia de las de régimen común con el tipo general de IBI más bajo de España, solo por detrás de Santander, que tiene el 0,41% y Zaragoza, con el 0,4123%.
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