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Isco, el último héroe del Bernabéu


En el fútbol hay héroes y villanos y la línea que separa a ambos es muy delgada, tanto que se puede cruzar con enorme facilidad. Para no irnos muy lejos en los ejemplos ahí está Iker Casillas, que pasó de lo primero a lo segundo por un simple dedo roto y un entrenador que engatusaba tanto a presidentes como a las aficiones de los clubs en los que procuraba ser el único dios. Se llamaba José Mourinho y ha probado también lo que es ser héroe y villano al mismo tiempo.

El último en cruzar la línea ha sido Francisco Roman Alarcón Suarez, el centrocampista malagueño que se presta a cumplir 23 años convertido en la nueva estrella del Bernabeu tras haber estado en el dique seco y oscurecido durante una larga temporada, y al que la estrella de la fama le llegó de rebote: se había puesto a trabajar duro para desterrar su imagen de vago y poco comprometido pero han sido las lesiones de Bale y Modric, por un lado, y la indolencia de Illarramendi, por otro, las que le abrieron las puertas de la titularidad. Algo que ha aprovechado al cien por cien.

Isco, que antes fue Pinchisco, el Minero y el Mago en su paso por el Benalmádena, el Valencia y el Málaga antes de llegar en 2013 al Real Madrid, tenía la calidad que ahora se aplaude. Le faltaba compromiso y sacrificio en el campo. Y suerte, sobre todo suerte y tiempo. Las dos cosas se las ha ganado con permiso de Carlo Ancelotti y con la ayuda sobre el césped de un " ángel" alemán que se llama Kroos.

El Golden Boy de 2012, el ganador del trofeo Bravo de 2013, el Bota de Bronce de ese mismo año se ha ganado al Barnabeu y en general a los aficionados de todos los campos de fútbol, que disfrutan con su visión del juego, su entrega total y su generosidad con los compañeros. Isco es consciente de que las estrellas del club blanco son Cristiano, Bale, Benzema y hasta Kroos y James, que son los fichajes estrellas, pero también es consciente de que su oportunidad ha llegado, que no quiere soltarla por mas que la recuperación de Modric sea un hecho, y que la defensa de su posición le llevará a renovar contrato y " estímulos" salariales. Si mantiene la titularidad en su club y Del Bosque le deja ese papel en la selección nacional, tanto Xavi como Iniesta ya tienen sustituto.

El peligro, su peligro, está en los aficionados y en los periodistas. Entre unos y otros pueden hacerle perder la cabeza, llevarle a un endiosamiento que le haga perder una de sus virtudes, la de la modestia y con ella la del esfuerzo reiterado cuando de jugar al fútbol se trata. Tiene un buen ejemplo en el que mirarse cada día, el de su capitán, el portero titular del Madrid, al que se le adoraba y al que ahora se le mira en cada gesto, en cada salida o permanencia en el área, en cada acción. Iker sabe de sufrimientos, de glorias y caídas en el infierno. Isco está pasando por una etapa de dulce, vendrán malos partidos, vendrán errores y tendrá que aceptarlos y hacer que los aficionados que le alaban, también los acepten.
Isco, el último héroe del Bernabéu