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La defensa del título



Al Secretario General de los socialistas le ha pasado desde el 5 de febrero de 2012, el día que se cerró el 38 Congreso Federal del PSOE, lo mismo que les pasa a los campeones de boxeo cuando vencen a su rival a los puntos y a la mañana siguiente a la del combate ya le están reclamando la revancha.

Alfredo Pérez Rubalcaba, con 487 votos, ganó a Carma Chacón, su rival, por sólo 22 apoyos. Los dos votos en blanco, el nulo y la abstención que se produjo son irrelevantes. Al igual que había ocurrido en el enfrentamiento entre José Bono y José Luis Rodríguez Zapatero, el resultado evidenciaba la división en dos partes casi iguales del socialismo español. En el caso de Zapatero su consolidación vino con la victoria en las generales frente a Rajoy, en el caso de Rubalcaba no se le quiere dejar que pueda competir de nuevo por el sillón de La Moncloa.

No creo que el actual equipo de mando del PSOE pueda alargar más allá del segundo aniversario de su victoria interna la proclamación de las fechas para el nuevo combate. Tendrá la ventaja que, al igual que entonces, los aspirantes son varios y tendrán que pelear previamente entre ellos para ver quién se enfrenta al final a don Alfredo, pues no parece que tenga intención de arrojar la toalla, ni que se lo permitan sus segundos, desde Elena Valenciano a Soraya Rodríguez pasando por el insumergible Óscar López.

El ring de la Conferencia Política está preparado para un " catch a 4" de lucha libre del que pueden salir con mayor claridad los dos finalistas. Apuesto a que uno de ellos será el propio Rubalcaba, pero el oro puede deparar sorpresas y grandes. No está claro que salga de los nombres que han aparecido hasta el momento. La audacia esta permitida y hasta premiada. Más que nunca los futuros votantes en esa elección de candidato van a ser incontrolables y puede que hasta un mucho malvados con sus actuales dirigentes. Si tuviera que apostar para ese segundo nombre, lo haría en femenino. Es su hora e incluso la mejor baza para que España se estrene con presidenta dentro de dos años.