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14 penaltis para un sueño



Se necesitaron 126 minutos de partido y 14 penaltis para que la final soñada en la Copa Confederaciones se materializara. Si a Brasil le costó ganar a Uruguay y en más de una ocasión se vio fuera de la final, a España le costó aún más superar a una Italia que ha vuelto a perder cuando todo se resuelve con los porteros en soledad bajo los palos. Buffon detuvo varios disparos que decían gol, y Casillas hizo lo mismo. Dos balones a los postes. Uno en cada portería. Muy bien Italia en el primer tiempo, con España sin encontrar como hacer frente al dominio de los " azules" en el medio campo. Bien los dos en el segundo bajo un calor y una humedad asfixiante que llevó a los jugadores a la extenuación. Muy bien España en la prórroga cuando machacó con Iniesta, Mata y Navas a una Italia que soñaba con los penaltis como tabla de salvación.

El entrenador italiano planteó de diez el encuentro. Se trataba de impedir que el medio centro español dominara con su juego de toque y toque y toque para desesperación de sus rivales y lo consiguió a base de potencia y de sumar jugadores en 30 metros. Vistos los primeros 45 minutos Vicente del Bosque hizo tres sustituciones que cambiaron la cara de España, sobre todo la primera, la que sacó del campo al canario Silva y dió entrada al sevillano Navas, lo que sumó a un cambio de banda de Pedro y a que el cansancio hizo presa de las piernas y la mente de los jugadores transalpinos.

Queda la final para agrandar la leyenda y los trofeos de nuestra selección. El ambiente en Maracaná será más insoportable - si es que ello es posible - de lo que ha sido en los encuentros anteriores, con unos espectadores que siempre se han posicionado contra " la Roja" como si deseasen que Brasil no tuviese que enfrentarse a la actual campeona del mundo y dos veces campeona de Europa. Ese miedo no debe confundir a nadie. Los brasileños han demostrado que tienen un buen equipo, sin más, pero juegan en casa y cuentan con dos hombres que son muy buenos con el balón en los pies y a la hora de interpretar sobre el césped. Habrá teatro el domingo.