El Samur Social colapsado, niños y enfermos duermen a la intemperie

Más de una quincena de adultos, algunos enfermos, y siete menores han vuelto a dormir al raso a las puertas del Samur Social, han trasladado vecinos de la zona a Europa Press.

La verja de las instalaciones municipales ha estado cerrada de nuevo, una decisión que se toma por una "cuestión técnica" y por "seguridad", argumentaba semanas atrás el delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, en la comisión del ramo.

Ha sido un vecino quien les ha facilitado mantas térmicas, han confirmado fuentes vecinales y el párroco de la San Carlos Borromeo, Javier Baeza, que en su blog, consultado por Europa Press, ha relatado lo que ha visto a los pies de la sede del Samur Social, un "espectáculo tenebroso que ralla lo esperpéntico".

Baeza carga contra el nuevo Gobierno municipal porque, "en cuanto llegó, utilizó el enverjado del edificio para no permitir que las personas abandonadas y sin acogida pudieran permanecer al menos al cobijo del soportal que franquea la entrada".

El párroco ha descrito la situación de las personas que allí han pernoctado esta noche: dos familias numerosas, de entre seis y siete personas, que llevan en la calle entre dos y tres días; una pareja de personas de mediana edad, que suman a sus espaldas tres días en la calle aunque la mujer esté enferma y, de hecho, ayer acudió a urgencias, y una tercera familia que ha sido acogida en la parroquia y que no ha sido atendida por los servicios públicos por ahora "porque no tienen traducción en su idioma".

"ENTRE LA VERJA, SU POBREZA Y LA INDIFERENCIA"

"Ahí se encuentran recluidos entre la verja, su pobreza y la indiferencia, un hombre diabético que hace días no toma su imprescindible medicación. Una mujer, con su criatura, que da vueltas y vueltas a unos papeles desvencijados. Otra mujer, enferma, que clama en distintas ocasiones al (personal de) seguridad de la verja que la deje entrar al baño", ha relatado.

"La respuesta es que no le llega la autorización para permitirlo", relata el párroco, quien también ha dado cuenta de la petición de unos de los niños a un vecino para que les bajara algún cuento con el que entretenerse por la noche.

"Paralelo a este camastro colectivo, en la misma calle con la misma acera, los turistas, transeúntes y trabajadores de dicho organismo, que salen de turno, se trasladan de un lugar a otro de forma impertérrita, como si el drama paralelo a sus andares no tuviera nada que ver con su existencia", clama Javier Baeza, que ha señalado que le propuso "al concejal responsable de los pobres en Madrid que deberían proclamar 'situación catastrófica municipal' ante lo que está ocurriendo".

De vuelta a la parroquia se ha topado con "ese magnífico monumento que es la basílica de San Francisco el Grande". "Cuánta luz, junto a vidas tan apagadas. Cuánto espacio vacío junto a lugares tan inhóspitos. ¿Que diría aquel pequeño trasto de Asís ante esos templos tan desalmados por no estar a disposición de los pobres? ¿Qué diría el tal Jesús al comprobar, escandalosamente, que 'a esta hora exactamente, hay un niño en la calle'... ¡Hay un niño en la calle!", lamenta el párroco.

DURMIENDO EN LA CALLE DESDE JULIO

Desde el pasado mes de julio se viene repitiendo la imagen de familias de distintas nacionalidades con menores pernoctando al raso, en la acera.

El área de Familias, Igualdad y Bienestar Social ha trasladado a Europa Press que los recursos de emergencia del Ayuntamiento de Madrid "se encuentran totalmente colapsados por la llegada masiva de refugiados", todo ello después de apuntar que "su atención corresponde al Gobierno central, que no está cumpliendo con sus competencias".

"Como consecuencia, cada vez es más difícil encontrar espacio para personas, incluidas familias, que se encuentran en situación de calle. Aún así, el Ayuntamiento trabaja para proporcionar una solución a esta familia y a cualquier otra", han añadido.

Recuerdan asimismo que el delegado, Pepe Aniorte, envió una carta junto con el consejero regional del ramo, Alberto Reyero, a las secretarías de Estado de Migraciones e Interior, con el fin de organizar una reunión urgente para buscar soluciones. La reunión tendrá lugar este martes. Confían salir de ella con "propuestas por parte del Gobierno que permitan superar esta situación".

ANIORTE: "NO DAMOS MAS DE SI"

El delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, ha declarado desde la Cañada Real que se necesita transmitir a los madrileños que la ciudad está "en una situación de crisis profunda" con la llegada de personas refugiadas y que Madrid siempre será solidaria pero que no tiene capacidad suficiente de acogida en este momento.

"Madrid es y será una ciudad de acogida y solidaria pero no damos más de sí", ha lamentado. Esta noche más de una quincena de adultos, algunos enfermos, y siete menores han vuelto a dormir al raso a las puertas del Samur Social.

Aniorte ha calificado la situación de "extrema" para recordar, a renglón seguido, que "todas las personas que están buscando asilo y refugio son competencia del Gobierno central". "Madrid ha asumido a 4.000 personas refugiadas en estos últimos meses. Y no, Madrid no tiene ni una plaza más para acoger", ha asegurado.

Para buscar soluciones, el Ayuntamiento y la Comunidad se reunirán este martes con Interior e Inmigración. Buscarán una respuesta conjunta ya que no se puede olvidar que "Madrid es la primera frontera de España con Barajas".

Aniorte ha indicado que este año han solicitado asilo en la Comunidad "casi el doble que el año anterior" (35.000 frente a 20.000). "Esta situación nos está desbordando y Madrid no puede ser la puerta de entrada de la mayoría de solicitantes de asilo", ha continuado el concejal. Pone sobre la mesa, días antes de la reunión, propuestas como derivar a otras comunidades y activar otros recursos.

La solución tampoco está, como ha expuesto, en la Campaña municipal del Frío, que históricamente abría a finales de noviembre. Sus recursos ya están activados "hace semanas y tardaron cinco días en llenarse".