El Pleno aprueba la ordenanza que sube las sanciones en materia de limpieza

El Pleno del Ayuntamiento ha apruebado, con los votos en contra del PSOE e IU, la Ordenanza de Limpieza y Gestión de Residuos, que, entre otras novedades, sancionará a los vecinos que no separen sus residuos, a los que hagan pintadas o dejen abandonado el coche o los excrementos caninos en la calle.

Unos 300 agentes de residuos ambientales del Ayuntamiento de Madrid controlarán que la ordenanza sea una realidad, analizando contenedores y observando, en líneas generales, que los nuevos parámetros de limpieza se cumplen.

La ordenanza, que sustituye a la anterior, de hace 23 años, castiga con hasta con 750 euros a quienes no separen en origen sus residuos, con hasta 6.000 euros -o trabajos comunitarios en su lugar- a los graffiteros reincidentes y con otros 6.000 euros, más coste de traslado y estancia en el depósito, a quienes abandonen su coche en la vía pública.

No recoger los excrementos de una mascota podrá tener un coste de hasta 1.500 euros y dar de comer a los animales callejeros, escupir en la acera o rebuscar en papeleras y contenedores de hasta 750 euros.

En general, las infracciones leves pasan de 60 a 750 euros, más de 12 veces más; las graves de 90 a 1.500, casi 17 veces más, y las muy graves de 150 euros hasta 3.000 euros, 20 veces más.

La norma obliga a los organizadores de actos públicos no recogidos como derechos constitucionales -como por ejemplo una huelga- a depositar una fianza para responder de los costes derivados, en su caso, de los trabajos extraordinarios de limpieza que sean necesarios.

También, por primera, vez se regulan los Puntos Limpios como instalaciones que favorecen la recuperación de residuos y evitan vertidos incontrolados, así como los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE).

Los grupos de la oposición, PSOE e IU, se oponen sin embargo a la nueva norma por "intimidatoria" y "recaudatoria", y porque consideran que su "único objetivo" es "imponer sanciones fiscales con argumentos ecológicos".

La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) ha opinado, por su parte, que esta ordenanza responde a "la ofensiva recaudatoria" con la que el Ayuntamiento de la capital está castigando a los madrileños "para hacer frente a la crisis de los ingresos municipales debido a la elevada deuda".

También la FRAVM y varias organizaciones ecologistas, como Amigos de la Tierra, han pedido hoy al Ejecutivo municipal del PP que apruebe mañana la propuesta que la hará IU para implantar el compostaje doméstico en centros educativos, comunidades de vecinos y domicilios.

La propuesta, que contempla el descuento del 50 por ciento de la tasa de basura a los participantes en este proyecto, es considerada como "un paso adelante en el camino a la protección del medio ambiente urbano" de Madrid.