Se acabó el insomnio nocturno para el presidente en funciones. Acepta al líder de Podemos de vicepresidente y ambos se disponen a poner en marcha un gobierno “progresista”. Parece, tras el rápido anuncio, que con acuerdos previos con otras fuerzas para acara adelante la investidura. Lo imposible en julio se ha hecho realidad en noviembre.
Cura de humildad política para Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. No quisieron pactar un gobierno cuando sumaban 165 escaños y ya lo han hecho con 155. Antes y ahora podrán contar con los suficientes votos parlamentarios de nacionalistas y regionalistas como para que el candidato del PSOE consiga la investidura y hasta por mayoría absoluta.
A veces se gana cuando se pierde y con los resultados del 10N puede que esa sentencia popular se cumpla. En siete meses han cambiado cosas importantes en el panorama político. La más destacada: la subida de Vox y el miedo que supone para el resto de los partidos, tanto de izquierdas como de derechas. Y en segundo y no menos importante, la caída electoral de Ciudadanos y el adiós de su carismático líder, Albert Rivera.
La fragmentación del Congreso, con 16 partidos o agrupaciones políticas en su seno, aparece como una debilidad y un obstáculo para salir de la encrucijada en la que se encuentra políticamente nuestro pais. Verdad muy a medias. La solución se le presentaba al actual presidente en funciones muy al alcance de su mano. Si convencía al líder de Podemos el resto del “camino” sería mucho más fácil.
Sánchez partía con la seguridad de que por la derecha es prácticamente imposible que se forme una mayoría alternativa. Los 140 escaños que suman el PP y Vox no parece que vayan a contar con muchos más aliados. A partir de esa realidad y con el “compromiso moral” de todas las fuerzas de no repetir otras elecciones, a los 155 votos parlamentarios que tendrá ese acuerdo en la izquierda se sumarán posiblemente los tres de Más País, loos siete del PNV, los dos de Canarias, el del PRC cántabro y, por qué no, el solitario de Teruel Existe. Si como parece por las declaraciones de su portavoz ERC está dispuesta a sumar sus trece escaños la mayoría absoluta está más que asegurada. Y llegados a ese punto, ¿por qué no intentar que Ciudadanos se sume a esa apuesta?.
Reacciones muy duras tras el abrazo de Sánchez e Iglesias por parte de Santiago Abascal y de Pablo Casado; y optimismo controlado entre las fuerzas que propiciaron el voto de censura, sobre todo entre los independentistas catalanes que, en el mismo día, recibían la decisión del abogado de la Unión Europea que puede propiciar la puesta en libertad de Oriol Junqueras.
Se abre una nueva etapa en la moderna historia de este país, el primer gobierno de coalición desde los muy lejanos años treinta con la II República. Formado el Gabinete, los previsibles problemas internos con el mundo financiero y los partidos de derecha se quedarán pequeños ante las reacciones de la Comisión Europea y del Fondo Monetario que van a imponer la necesidad de mayores ajustes en nuestra economía.
La futura aprobación de los Presupuestos Generales será la clave para una Legislatura que puede ser más corta de lo que los dirigentes del PSOE y Podemos desean y sobre la que ha pivotado el rápido acuerdo.
