La portavoz socialista de Cultura en el Ayuntamiento dice que el Gobierno municipal "no tiene en cuenta a los profesionales" de la cultura y todo porque "Ahora Madrid tiene un panzer cultural" con el que "a veces disparan cañonazos para mostrar su fortaleza"
La portavoz socialista de Cultura en el Ayuntamiento de Madrid, Mar Espinar, ha arremetido este lunes en la comisión del ramo contra los "cañonazos" del "panzer cultural" que cree que es Ahora Madrid, al tiempo que ha opinado que la alcaldesa, Manuela Carmena, se mantiene en Cultura para "apagar fuegos" cuando debería "dejar la Alcaldía y centrarse en cultura".
Carmena, por su parte, ha opinado que los "consejos" de la edil del PSOE "no son acertados" ni oportunas las "descalificaciones" ya que el área se está caracterizando por la "buena gestión", que "cada vez es más excelente y las cosas van extraordinariamente bien, cada vez mejor".
Espinar ha insistido en su discurso declarando que el Gobierno municipal "no tiene en cuenta a los profesionales" de la cultura y todo porque "Ahora Madrid tiene un panzer cultural" con el que "a veces disparan cañonazos para mostrar su fortaleza". En la misma línea, la concejala ha opinado que no deja la concejalía porque "no encuentra candidatos entre su gente".
Carmena ha insistido en que la programación cultural ha sido muy bien aceptada y prueba de ello es que "no ha habido crítica alguna" hasta este momento. Mar Espinar, a su vez, ha llevado a la comisión el "problemón" que el área tiene con las subvenciones culturales, lo que ha servido para que la alcaldesa le haya afeado un discurso que "no es serio" porque "no es capaz de enumerar el 'problemón' de las subvenciones".
PP Y CIUDADANOS CARGAN CONTRA LOS VERANOS DE LA VILLA
Tanto PP como Ciudadanos han coincidido en la crítica a la edición de Veranos de la Villa al considerar que la programación ha quedado "diluida en las fiestas de los barrios" mientras que la alcaldesa, Manuela Carmena, ha contestado irónicamente que comprende que "cueste aceptar el éxito de los demás".
"Es lamentable que se renuncie a ser uno de los grandes referentes culturales del verano. Con la valoración de incorporar espacios históricos, se han cargado la identidad del festival para diluirlo en las fiestas del barrio. Incorporar un torneo de petanca está bien para las fiestas de barrio pero es penoso en la programación de Veranos de la Villa", ha manifestado en la comisión de Cultura y Deportes la portavoz del área del PP, Isabel Rosell.
"No deberían conformarse con los programas realizados sólo en los barrios. Los Veranos de la Villa han perdido fuelle y tirón y parecen la continuidad de Ciudad Distrito, es su deja vú. Prefieren desterrar lo que funcionaba por motivos ideológicos, no culturales", ha contestado la portavoz de Cultura de Ciudadanos, Sofía Miranda.
Carmena ha detallado que los Veranos de la Villa echaron el cierre con 80.500 espectadores y con el cartel de aforo completo en 88 de sus 90 propuestas, repartidas en 64 escenarios repartidos por los 21 distritos de la ciudad. El 80 por ciento de las 90 propuestas artísticas fueron de acceso libre mientras que el resto tuvieron un precio muy asequible, con un máximo de 15 euros por entrada. El presupuesto ha rondado los 1,4 millones de euros.
El festival ha contado con 18 países invitados: Perú (2), Gran Bretaña (4), Alemania, Francia (4), México (4), Grecia, Sudáfrica, Estados Unidos (3), Colombia, Chile (2), Italia (3), Irlanda, Portugal, Macedonia, Dinamarca, Islandia, Argentina (2), Holanda; y 25 instituciones y programas. Un tercio de la programación del festival ha sido de carácter internacional.
Además fueron cinco los Premios Nacionales que han pasado por el festival: Premio Nacional de Músicas actuales Jorge Pardo; Premio Nacional Músicas actuales Santiago Auserón; Premio Nacional de Danza, Losdedae; Premio Nacional de Circo, Vaivén Circo; y Premio Nacional para la infancia y la Juventud, Titirimundi.
"Ha sido un éxito del Ayuntamiento", ha resumido Carmena, que ha destacado, por ejemplo, la ópera en los 21 distritos como 'pago' a la renuncia municipal del palco en el Teatro Real, algo que ha tildado de "privilegio inaceptable".
Esto ha llevado a la concejala de Cs Sofía Miranda a considerar que no eran actuciones específicas de Veranos de la Villa sino que pueden formar parte de la programación estable, como ocurre también en el caso de los títeres del Retiro. La edil ha echado en falta también la colaboración de los centros deportivos municipales y de las bibliotecas en las propuestas de Veranos de la Villa.
La socialista Mar Espinar se ha sumado a la tanda de críticas afeando la "opacidad en la contratación", tal y como "hacía el PP" porque "debe ser que los polos opuestos se atraen". "Veranos de la Villa no es un pastel a repartir" sino que se trata de hacer "convocatorias más accesibles a los sectores culturales porque hay promotores que tienen las puertas cerradas y agentes culturales vetados". Sí que ha aplaudido que este año haya habido cambios en lo que respecta a la política de precios porque en los Veranos de la Villa 2016 dos conciertos como el de Calamaro y el de Quique González en el Price la entrada se fijó en 30 euros.
La popular Isabel Rosell ha echado en falta escenarios como los Jardines de Sabatini o el Puente del Rey, así como un mayor impulso a la Plaza Mayor. "¿Será por una campaña contra el turismo en el Madrid histórico?", ha lanzado, después de mostrar una análitica con datos de Google Trends que muestra "la bajada de interés en las consultas de Veranos de la Villa".
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